jueves, 28 de febrero de 2013

Cine y Literatura: El Hobbit y El Señor de los Anillos

¿Quién no ha oído hablar de El Hobbit o de El Señor de los Anillos? Son unos libros buenísimos, escritos por John Ronald Reuel Tolkien (J.R.R. Tolkien). Se publicaron entre 1937 y 1955 pero ahora, con las películas de Peter Jackson, se han vuelto a poner de moda.





El Hobbit es una novela de un solo tomo pero El Señor de los Anillos está dividido en tres tomos: La Comunidad del Anillo, Las dos Torres y El retorno del Rey.

Debo confesar que nunca me atrajo esta historia, la veía un poco pesada y aburrida... Hasta que vi la película de Las dos Torres (segunda parte de El Señor de los Anillos). En ese momento aún no tenía la novela, por lo que se la pedí a un vecino, buen amigo de la familia, que tiene casi todas las obras de Tolkien. Huelga decir que me la leí de un tirón. Pero en ese momento yo aún no sabía que había una 'precuela': El Hobbit. Mi padrino me regaló, en dos tandas, las novelas de Tolkien: primero El Hobbit y después El Señor de los Anillos.

Tolkien siempre explicaba que El Hobbit era una serie de cuentos que solía contar a sus hijos. Se los dejó a un amigo para que los leyera. A partir de entonces, sin que el escritor lo supiera, esos relatos fueron pasando de mano en mano hasta que llegaron a la editorial londinense George Allen & Unwin, donde se publicaron por primera vez en forma de novela.

Debido al éxito que tuvo El Hobbit, la editorial pidió a J.R.R. Tolkien que escribiera una secuela. Al principio, Tolkien quiso que fuera también un libro enfocado para niños, pero recordó el anillo de Bilbo Bolsón y decidió centrarse en él. Creó una historia más seria y tenebrosa, más dirigida a adultos que a niños: El señor de los Anillos.

Tolkien era baptista pero se convirtió al catolicismo, por lo que deja huellas de sus creencias en la novela, la más importante de ellas es la lucha del bien y del mal. También trata de los valores humanos como la amistad.

El Hobbit cuenta el relato de un maiar (Gandalf), un hobbit (Bilbo Bolsón) y trece enanos (Thorin, Balin, Glóin, Bifur, Bofur, Bombur, Dwalin, Ori, Dori, Nori, Óin, Kíli y Fíli) que van a recuperar el Reino de los Enanos (Erebor, también llamado la Montaña Solitaria), dominado por Smaug (un dragón). A medio camino, Bilbo se separa del resto y se encuentra con Gollum, del que logra huir gracias a un Anillo. Más tarde, matan a Smaug y recuperan Erebor.

El Señor de los Anillos narra la historia de la destrucción del Anillo con el que Bilbo Bolsón logra escapar de Gollum (cuyo verdadero nombre es Smeagol). Entre ambos libros ha pasado largo tiempo: Sauron ha dominado la Tierra Media y el único modo de vencerle es destruyendo el Anillo que tiene Bilbo. Esta novela la protagonizan cinco hobbits (Frodo y Bilbo Bolsón, Samsagaz (Sam) Gamyi, Peregrin (Pippin) Tuk y Meriadoc (Merry) Brandigamo), dos maiar (Gandalf y Saruman), tres dúnedain (Aragorn, Boromir y Faramir), tres elfos (Galadriel, Legolas y Arwen), tres rohirrim (Théoden, Éomer y Éowyn), un enano (Gimli) y un peredhil (Elrond); Gollum/Smeagol es un hobbit corrompido. El Señor de los Anillos enlaza de manera magistral varias historias entre sí: la destrucción del Anillo, la destrucción de Sauron y la 'reconquista' por parte de los rohirrim y los dúnedain de las tierras invadidas por los aliados de Sauron (orcos, trols, uruk-hai...). A medida que van pasando los tomos de la novela, ésta se vuelve cada vez más oscura y más compleja.

Ambas novelas te llevan a un mundo lejano, la Tierra Media, descrito con muchísima minuciosidad por Tolkien (puedes leer páginas y páginas en las que sólo hay descripciones de los personajes o del entorno que los rodea): verdes prados, cielos azules y tierras secas y oscuras... El escritor es súper cuidadoso hasta con el más mínimo detalle.

Peter Jackson ha sabido hallar todos esos detalles y los ha sabido plasmar con maestría en las películas. Son largas y quizás un poco tediosas, pero son unas de las pocas películas que he visto que sean totalmente fieles a las obras literarias en las que se basan o a lo que quiere transmitir en ellas el autor. El lugar escogido para la filmación (Nueva Zelanda) te permite ver con mucha claridad todo lo descrito por Tolkien, así como los actores, que saben transmitir lo que Tolkien deseaba que viéramos en sus personajes. Peter Jackson se empapa de Tolkien y lleva sus obras a la pantalla de una manera tan fiel que muy pocos directores saben hacer cuando hacen versiones cinematográficas de obras literarias.

Si me lo permitís, hay una anécdota sobre el autor y su obra: a pesar de que nosotros conocemos El Señor de los Anillos como una trilogía, a Tolkien jamás le gustó que se la tratara como tal, él decía que era una novela dividida en tres tomos por motivos editoriales, pero que jamás fue concebida como una trilogía.

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