lunes, 30 de diciembre de 2013

Viajando a Kenia

Perdonad que os haya tenido un poco olvidados, pero la verdad es que, desde que empecé a trabajar en La Vall en el Proyecto de Lectura, he ido un poco de cabeza... Aún así, he ido leyendo (ya sabéis que, si no leo, me siento muy rara...).

El Proyecto de Lectura de mi antiguo Colegio en el que me han pedido que colabore es muy bonito, se trata de hacer ver a las alumnas que no sólo se lee por obligación o porque lo dicen en el Colegio sino porque también nos aporta cosas buenas, nos ayuda a madurar, a mirar más allá de lo que dicen los libros, a desarrollar la imaginación... Vaya, un sinfín de cosas, todas positivas.

Hace poco vino a La Vall el escritor Miguel Aranguren para hablar a las alumnas de ESO y Bachillerato de su libro Desde un tren africano (2005) y de su Proyecto, llamado Excelencia Literaria.


Estuve en todas las sesiones que impartió a las alumnas y me pareció una persona muy interesante e inteligente, a la vez que cercana. Noté que le gusta compartir su experiencia literaria con los demás. Ése es el motivo por el cual creó el Proyecto Excelencia Literaria. Es un proyecto dirigido a jóvenes a los que les gusta leer y escribir. En él, Aranguren les enseña trucos y métodos de escribir de tal manera que pueda atraer a los lectores. Aunque iba dirigido a las alumnas, yo también pude coger alguna que otra idea, espero saber ponerla en práctica...

No me he olvidado de su libro. Desde un tren africano es un libro autobiográfico que narra el viaje del autor a Kenia durante su adolescencia. Es un libro del que se puede pensar 'vaya, un libro más de experiencias solidarias en África' (de hecho, yo lo tenía por casa y no lo había leído porque pensaba precisamente eso), pero en las sesiones que impartió en el Colegio (y a las que tuve la suerte de poder ir como encargada del Proyecto de Lectura) lo empecé a ver de otra manera, empecé a ver el cambio (real) que produjo en el autor este viaje, pude ver, por lo que contaba, que durante el viaje hizo locuras, pero también hizo reflexiones, vio que necesitaba un cambio y, aunque ese cambio fuera doloroso para él, se empeñó en lograrlo y en salir adelante con sus nuevos propósitos, costara lo que costara.

Obviamente, es una percepción personal, por lo que puedo estar equivocada, pero desde este blog transmito mis opiniones sobre lo que leo.

Me leí la novela dos veces seguidas, la primera para ver lo que decía Miguel Aranguren, y la segunda para ver lo que realmente quería decir. No es lo mismo lo que dices que lo que quieres transmitir cuando dices las cosas. Vi muchas cosas y yo misma pude reflexionar con lo que el escritor quería decir.

Realmente, es un libro para recomendar porque se disfruta leyéndolo, porque lees y creces como persona a la vez. Desde un tren africano es una novela que merece estar en la estantería de nuestra Biblioteca. Es una obra humana y enriquecedora. Ojalá la disfrutéis tanto como yo.


Al final de las sesiones, cuando las alumnas ya se habían marchado, pude hacerme una foto con Miguel Aranguren. Desde aquí quiero darle las gracias por las sesiones que impartió en La Vall y por transmitir su entusiasmo por la lectura y la escritura. Me animó a seguir leyendo y escribiendo en este blog.

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