domingo, 13 de julio de 2014

La II Guerra Mundial en Wandlebury

Hace poco comenté dos libros: El libro de la señorita Buncle y El matrimonio de la señorita Buncle en la entrada Conociendo a la señorita Buncle. La tercera parte de esta pequeña trilogía de D.E. Stevenson se titula Las dos señoras Abbott, publicada en 1942.



Las dos señoras Abbott narra las vivencias de Barbara y Jerry Abott, casadas con Arthur y Sam Abbott, respectivamente. Barbara y Arthur han tenido dos hijos: Simon y Fay. La fiel Dorcas sigue viviendo con ellos.

La novela mantiene la mayor parte de los personajes de la segunda parte pero también recupera personajes de la primera, como Sally Walkers, la esposa del médico de Silverstream (lugar de residencia de Barbara antes de casarse). D.E. Stevenson no pierde el hilo de las dos primeras novelas. De hecho, se recrea en describirnos la situación en la que se encuentra cada personaje a partir de su última aparición en los libros anteriores. Aunque, en esta ocasión, el protagonismo lo comparten Barbara y Jerry. Barbara centrada en su papel de madre y esposa y Jerry, en cambio, ha convertido su casa en un centro de operaciones y aloja a soldados. Su marido está en el frente.

La tranquilidad se verá un poco trastocada cuando llega la escritora Janetta Walters a casa de Jerry, buscando un poco de tranquilidad en un momento delicado de su vida profesional y personal. Con ella vuelve a salir el tema literario de la primera novela, un poco apartado en su continuación. Con ella volverán los pequeños enredos que caracterizan a la protagonista y que entretienen al lector.

La escritura se mantiene de la misma forma que sus predecesoras, con sus descripciones de la campiña inglesa a mediados del siglo XX y sus casitas, con los personajes que allí viven, cuyas características saca a relucir la autora con gracia e ironía... La autora es muy descriptiva, tanto que nos permite imaginarnos con facilidad todo lo que está escrito en sus obras por la cantidad de matices que encuentras en ellas.

Se trata de una novela amena y simpática, para pasar un buen rato. Las dos señoras Abbott es un divertido cierre a las novelas de Barbara Buncle. Pero no tiene el mismo fuelle ni la misma ironía aguda que tanto me gustaron de los dos primeros libros. No obstante, como ya he dicho, pasas un buen rato leyéndolo.

Yo recomendaría, si se puede, leer los tres libros seguidos para no perder el hilo de la trama. Seguro que te sale una sonrisa sin que te des cuenta.

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